ofrendas
pastorales
Ofrendas
El grupo de ofrendas actualmente está conformado por 12 miembros, algunos teniendo ya más de 20 años de estar sirviendo en este apostolado. Sus principales funciones son escoger dentro de los fieles quién lleve las ofrendas y quién ayude a colectar la limosna durante las Misas, y llevar este dinero a resguardo. Ayudan también a la recolección de las cooperaciones especiales que hay durante el año, repartiendo los sobres y depositándolos en las urnas especiales.
Actualmente cooperan también con los cantos cuando no hay un coro en la Santa Misa.
Dentro del grupo de ofrendas, se organizó nuevamente el rezo del Santo Rosario, (lunes, miércoles y viernes de 7:00 pm a 7:45 pm) estando encargado uno de los integrantes del grupo.
¿Cómo se prepara el Ofertorio y la procesión?
1.- Después de la oración de los fieles empieza la liturgia eucarística; y ésta, a su vez, comienza con el ofertorio. La comunidad toma asiento.
2.- Las ofrendas son presentadas por los fieles, no por los servidores del altar.
3.- El ministro ordenado que preside la celebración o diácono se ubicará entre el presbiterio y la nave central de la Iglesia.
4.- En la procesión siempre se deben llevar en primer lugar el pan y el vino y después otros dones que sean para el servicio de los pobres (alimentos) o de la iglesia (objetos litúrgicos, etc.).
5.- La procesión se hará por el corredor central de la Iglesia.
6.- Los que participen de la procesión harán una inclinación de cabeza antes de entregar la ofrenda al ministro ordenado que preside la celebración u otro ministro delegado por él y, sin decir nada, regresan a su lugar.
7.- Si además de las ofrendas eucarísticas del pan y el vino se llevan otras ofrendas es oportuno precederlas de alguna monición durante la procesión.
8.- Si no hay monición debe haber un canto apropiado; no es cualquier canto.
9.- Si hay canto, éste se comienza cuando se inicia la procesión.
10.- La ofrenda de dinero que se recoge durante la procesión de los dones, que es también parte de la ofrenda, debe colocarse en un lugar visible, cerca del altar.
11.- Otro tipo de objetos pueden llevarse con carácter simbólico. Pueden simbolizar agradecimiento a Dios, nuestro compromiso de fidelidad a Él, nuestras buenas acciones, nuestros trabajos y sacrificios, etc. Hay que recordar que a Dios se le ofrece lo mejor, de lo mejor.
12.- Obviamente hay que tener cuidado en lo que se presenta y se debe hacer con el visto bueno del ministro ordenado que presida la celebración.
13.-Eso sí, lo que se lleva como don al altar debe ser algo que se queda y no debe recuperar la persona al final de la celebración de la misa